La mejor manera de aprender un idioma es por medio de la exposición natural y prolongada al mismo. Es por ello que el inglés es parte esencial de nuestra jornada y es el idioma vehicular de todas nuestras actividades.

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No lo simplificamos, ni utilizamos listas de vocabulario. Nosotros se lo presentamos a los niños de manera natural para que su adquisición sea efectiva y real. Utilizamos el inglés en cualquier contexto, en las rutinas y en las actividades para que exista una  inmersión en el idioma al 100%.

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Los primeros años de vida son fundamentales para que la adquisición de cualquier idioma sea totalmente intuitiva y natural. Es el mejor momento para aprenderlo y es un regalo que les hacemos a nuestro hijos de cara al futuro.

 

Todos los bebés nacen con la capacidad intuitiva de aprender un idioma y nuestra escuela es el entorno ideal para una inmersión real en el inglés, lo que hace que su adquisición sea totalmente natural.